El color oscuro en la lengua de los
perros puede ser parte de su genética o, en determinados casos, señalar una condición médica que requiere revisión profesional.
Aunque algunas razas tienden a presentar esta pigmentación desde el nacimiento,
también es posible que aparezca con el
tiempo por diversos factores.
Veterinarios
advierten que, si la lengua de un perro cambia de color repentinamente o aparecen manchas que antes no estaban,
se debe consultar con un especialista. Este tipo de modificaciones puede estar vinculado a problemas
respiratorios, intoxicaciones o incluso ciertos tipos de tumores.
No todos los casos son motivo de
preocupación, pero
aprender a diferenciar los signos normales de los que pueden llegar a indicar
una posible patología es clave para el
bienestar del animal.
La
pigmentación oscura en la lengua de un perro puede ser parte de una
característica propia de su raza. Algunas
como el Chow Chow, el Shar Pei y el Eurasier nacen con la lengua completamente
negra o con manchas desde pequeños. Este color poco común no implica
riesgos para su salud, siempre que se mantenga estable en el tiempo.
Uno de los
motivos más comunes detrás de esta alteración es la dificultad respiratoria.
Condiciones como la parálisis laríngea, el colapso de la tráquea, la neumonía o
incluso la presencia de parásitos en los pulmones pueden reducir la cantidad de
oxígeno en el organismo, lo que se manifiesta a través de cambios en el color
de la lengua.
También pueden influir otros factores
como lesiones físicas,
por ejemplo, inhalación de humo o traumatismos, acumulación de sangre por un
hematoma o incluso intoxicaciones severas. En situaciones más graves, la lengua negra podría estar asociada a la
presencia de un tumor en la cavidad bucal.