Detrás de su aspecto inocente y tantas veces adorable, los
gatos, especialmente fuera de casa, pueden representar una amenaza para nuestra
salud si, por ejemplo, nos muerden. Aunque casi nunca se tratará de enfermedades
graves, salvo complicaciones, estos felinos son capaces de contagiarnos algunos
trastornos.
Por eso, aunque nos atraigan, siempre hay que tener cuidado
con los que nos encontramos por la calle. Y, si nos muerden o arañan, no está
de más pasar por el médico si notamos síntomas anormales. Antes, lo mejor es
lavar con agua y jabón la zona de la herida para eliminar los restos de saliva.
También sería recomendable usar agua oxigenada para desinfectar la mordedura.
En casa, los arañazos y mordeduras de nuestras mascotas son
más habituales, pero normalmente no habrá problemas si el animal ha sido tratado
de manera adecuada en su higiene, con las vacunas y en las visitas al
veterinario.
¿Por qué muerden los
gatos?
Como parte de la secuencia de caza, que incluye 1-acechar a
la presa, 2- perseguirla, 3- capturarla o cobrarla, 4- morderla, 5- matarla y
6- comérsela.
Como estrategia de autodefensa cuando se sienten amenazados
Dentro del primer punto, quedaría incluida la razón por la
cual algunos gatos muerden mientras juegan, ya que el juego es, en parte, un
“entreno” para la vida real. Es decir que muchos de los comportamientos propios
del juego son parte de la secuencia predatoria que luego hace posible la
supervivencia del gato si vive en estado salvaje. Por eso la mayoría de los
juguetes para gatos incitan el movimiento y la caza. Pero claro, una cosa es
entender por qué muerden los gatos y otra muy distinta es comprender y aceptar
que lo hagan cuando los acaricias.
¿Por qué mi gato me muerde cuando lo acaricio?
Por naturaleza, los gatos son animales menos sociables que
otras especies domésticas como pueden ser los perros. Por lo general, la
estrategia de supervivencia del gato (cuando vive en libertad) se basa en la
caza en solitario de pequeñas presas como ratones, topillos y otros animales de
poca envergadura. El gato es, esencialmente, un animal solitario que no suele
vivir en grupo junto a otros animales. Y este rasgo forma parte de su
naturaleza.