
En el debate sobre la longevidad y el bienestar, la ciencia
distingue entre dos formas de envejecer. La edad cronológica responde a los
años que una persona vivió, pero cada vez más investigaciones se concentran en
la edad biológica, término que reúne las condiciones funcionales de células,
órganos y sistemas e incorpora el ritmo de desgaste del cuerpo.
El impacto del ejercicio sobre la salud celular y la
longevidad es uno de los campos más explorados por la ciencia. “El ejercicio
físico actúa directamente sobre varios procesos celulares relacionados con el
envejecimiento”, explicó a este medio la profesora de Educación Física Claudia
Lescano.
Las elecciones alimentarias tienen un efecto directo sobre
la epigenética y la edad biológica. “La evidencia de los últimos años permite
profundizar en cómo nuestras decisiones alimentarias modulan el
envejecimiento”, afirmó Aguirre Ackermann.
El descanso nocturno se presenta como un pilar decisivo en
la reparación y el envejecimiento saludable. El médico neumonólogo y jefe del
Laboratorio del Sueño en el Hospital de Clínicas, Facundo Nogueira así lo
confirmó.