Aunque no se conoce a ciencia cierta el origen de los perros chihuahua, la teoría más extendida es que provienen de una raza antigua llamada «Techihi», a la que capturaron y domesticó la civilización Tolteca.

 

En realidad, esta raza de perros se denomina «chihuaheño». El por qué se le conoce como chihuahua, es porque se encontró en la ciudad de Chihuahua (México).

 

Si por algo es bien conocida esta raza es por ser la más pequeña del mundo, tanto en peso como en altura y longitud. En la edad adulta, tan sólo pesa 3 kilos y apenas supera los 20 centímetros de altura.

 

A pesar de su pequeño tamaño, los chihuahuas son perros muy inteligentes y valientes. Tienen una personalidad amable y cariñosa, así que es fácil crear un vínculo emocional con ellos.

 

Aunque son la raza con mayor esperanza de vida, la salud de los chihuahuas es delicada, sobre todo en lo que al sistema cardiovascular se refiere. Por lo tanto, hay que prestar especial atención a si los perros sufren debilidad, tos, dificultad respiratoria o vómitos.

 

Los chihuahuas suelen temblar mucho, y no sólo cuando tienen frío. Tienen una capa muy fina de pelo, así que los temblores les ayudan a aumentar la tasa metabólica y calentarse. Por esta razón, al salir a pasear con ellos en invierno es recomendable ponerles un abrigo. Más allá del frío, los chihuahuas tiemblan por un exceso de energía o porque están nerviosos.