¿Cómo podemos detectar la dermatitis atópica y qué debemos
hacer al respecto? Especialista nos brinda información al respecto.
En muchas ocasiones, las
alergias en perros se atribuyen erróneamente a diversas causas, pero suelen
manifestarse debido a factores externos que desencadenan una reacción
inmunológica descontrolada. La piel de
los caninos es la parte más afectada en la mayoría de los casos.
Como tutores de perros, es habitual notar una zona rojiza en
la piel de nuestros animales y pensar que puede ser causada por pulgas, alguna
enfermedad o incluso por algo que hayan ingerido. Afortunadamente, si se
detectan rápidamente, estos síntomas
suelen ser fáciles de tratar y se resuelven rápidamente. Sin embargo, si la
condición se hace cada vez más frecuente o no mejora en su totalidad, podríamos
comenzar a sospechar de un componente alérgico.
Por lo general, un
10% de los perros se ven afectados por alergias de tipo atópicas o
ambientales, ellas son originadas por alérgenos ambientales, como los ácaros
del polvo, pólenes de hierbas, árboles y gramíneas, entre otros. Los
principales signos son lesiones en la piel y picazón que puede variar desde
permanente a estacional.
Por lo tanto, ante la
presencia de picazón que no mejora, lamidos permanentes y/o lesiones crónicas
en la piel, es necesario llevar al perro al veterinario para realizar un
diagnóstico más a fondo, en donde se descarten causas más frecuentes de
picazón, como parásitos externos.
Además, es normal que para poder diagnosticar correctamente
esta enfermedad, los perros deban pasar por una dieta de exclusión y confirmar
que la alergia no es de tipo alimentaria. De ratificarse la atopia se debe
comenzar un tratamiento inmunosupresor junto a inmunoterapia
alérgeno-específica preferentemente, explica Carolina Figueroa, Médico
Veterinaria de Royal Canin.
Ambos tratamientos
desempeñan un papel importante en el control de la dermatitis atópica y
pueden ser utilizados de forma simultánea. Sin embargo, la alimentación suele
ser el punto de partida para garantizar que nuestro perro reciba los nutrientes
necesarios para la reparación de su piel. Además, existen ciertos componentes en la dieta que pueden ayudar a reducir la
inflamación cutánea, como los ácidos grasos omega 3.
"Es importante también poder distinguir una alergia de
la piel seca. Aunque no es algo tan común en los perros, esta condición se
puede prevenir manteniendo a nuestras mascotas alejadas de fuentes de calor,
especialmente en esta época del año, además de realizar los cuidados habituales
durante todo el año, como un cepillado adecuado y baños frecuentes",
explica la experta.
En resumen, la dermatitis atópica es una causa frecuente de alergias en
perros, siendo importante identificar sus síntomas y buscar un diagnóstico y
tratamiento adecuados. Con el cuidado apropiado, podremos ayudar a
nuestros perros a mantener una piel sana y libre de molestias.