"Los mestizos se enferman menos" o "pueden comer de
todo" son algunas frases que por décadas se repiten para referirse a
los perros y gatos mestizos, dejando entrever que tal vez por genética u otros
mitos, estos animales tienen "súper
poderes".
Pero es importante
desmitificar. Algunas razas específicas
son más proclives a sufrir ciertas enfermedades o al menos presentar mayor
prevalencia en determinadas edades, pero eso no libera a los mestizos de alguna
patología, y por ende la calidad de su tenencia, incluyendo también la
alimentación, es fundamental para garantizar que su vida sea en las mejores
condiciones posibles.
Axel Haleby, Médico
Veterinario, explica que "es muy posible que el mito provenga de los
animales callejeros, que lamentablemente deben buscar subsistir alimentándose
de formas inadecuadas y no saludables. Pero lo cierto es que a la larga
esto trae consecuencias para la salud, tal como ocurre con los humanos".
En ese sentido, y en el
caso de los animales mestizos, el
especialista llama a tener especial
cuidado con las enfermedades renales, que pueden afectar indistintamente a
cualquier perro o gato, sin importar su raza.
"Especialmente en gatos, que en ciertas épocas del año pueden dejar
de consumir el agua necesaria para su total bienestar, hay que estar atentos a
posibles signos de deshidratación, como perder elasticidad de su piel, presentar escasa orina, o tener el hocico
y encías secas, entre los más comunes, o también aumento de la frecuencia
cardíaca", explica Axel Haleby.
Como una forma de mitigar
la resistencia felina al consumo de agua es que proliferaron los alimentos
húmedos, incluyendo snacks saludables como Churu, perfectos para gatos y
también perros, y que además de ser un buen complemento a su dieta habitual,
los desestresan y divierten proporcionándoles la hidratación necesaria.
Especialmente en invierno,
en que debido a las menores temperaturas algunas mascotas podrían no desear
beber agua, o hacerlo en menores cantidades, el llamado es a estar muy atentos y ante cualquier signo de
deshidratación acudir rápidamente al veterinario. Un diagnóstico temprano
es clave para iniciar el tratamiento más recomendable o cambiar los hábitos
alimenticios y de hidratación.