Los gatos son animales que se pueden comunicar y expresar sus emociones
a través de expresiones faciales, corporales y vocalizaciones. Si
alguna vez te has preguntado qué te quiere decir tu minino con sus movimientos
y gestos acá te contamos.
Los gatos son capaces de expresar emociones básicas tales
como: alegría, miedo, frustración, agresividad, ansiedad. Todas estas tienen
como función principal movilizar al organismo para responder a los cambios en
el ambiente o internos, por lo que implican respuestas fisiológicas y de
comportamiento relativamente innatas y típicas de la especie. "Al observar las expresiones faciales
y las de su cuerpo, así como también, las vocalizaciones que expresan los gatos
ante una situación o contexto específico, podemos reconocer cuál es su estado
emocional. La importancia de esto es que nos sirve como una guía para obtener
información del estado mental del animal y de su bienestar animal; también,
para decidir cuándo interactuar y cuándo no, con nuestros gatos; si están
incómodos por alguna situación en particular. Así como a las personas no nos
gusta interactuar cuando experimentamos emociones negativas, tampoco deberíamos
obligar a nuestro gato a hacerlo cuando su estado emocional es de ansiedad,
miedo o agresividad", explica la Dra. María José Ubilla, Académica
Facultad de Medicina Veterinaria y Agronomía, Universidad de las Américas,
UDLA.
La doctora destaca que es muy importante comprender que
estas respuestas emocionales son individuales. Por ejemplo, el miedo lo puede
expresar un gato ante un sonido en particular de un electrodoméstico, ese mismo
sonido puede ser absolutamente neutral para otro gato. Sin embargo, todos los
gatos que manifiestan miedo lo hacen de una forma similar, mostrando su cuerpo
encorvado y musculatura tensa.
Gestos faciales y
posturas corporales
La doctora menciona que a través de los gestos faciales y
posturas corporales podemos obtener respuestas del estado emocional de un gato.
"Las emociones son respuestas a
eventos específicos que implican respuestas neurofisiológicas específicas de
acuerdo con cada tipo de emoción y que pueden surgir en diferentes contextos
según experiencias que haya vivido ese gato en particular. En este sentido,
la expresión de estas respuestas neurofisiológicas se traduce en relajación o
tensión muscular, movimiento/tensión de las vibrisas, movimiento de cola,
dilatación o no de pupilas, movimiento de orejas, expresión de un tamaño
corporal mayor o menor, entre otros".
En el estudio "Feline faces: Unraveling the social
function of domestic cat facial signals", de las investigadoras Lauren
Scott y Brittany Florkiewicz, se monitorearon 53 gatos mientras interactuaban
entre sí en un cat café. Encontraron que los
gatos pueden usar hasta 276 expresiones, cuando se comunican entre sí, y que
estas expresiones están compuestas por una combinación de 26 movimientos
faciales. Estos movimientos incluyen cambios en sus orejas, parpadeos o arrugar
su nariz.