Un avión privado se despistó este
mediodía cuando intentaba aterrizar en el aeropuerto de San Fernando y se
prendió fuego, luego de impactar en una zona de viviendas, según informaron
testigos. Como consecuencia del accidente murieron el piloto y el copiloto,
únicos tripulantes de la aeronave.
El avión involucrado es un
Challenger 300, matrícula LV-GOK, perteneciente a la familia de Jorge Brito -dueño
del Banco Macro y presidente de River-. Volvía a Buenos Aires luego de
realizar un viaje a Punta del Este: “En el momento del accidente sólo estaban a bordo el
piloto y el copiloto”, aseguraron.
“El avión entró pasado a la pista y
por alguna circunstancia no pudo frenar, terminó despistándose e impactando con
viviendas que están al lado del aeropuerto”, detallaron fuentes
aeronáuticas.
De acuerdo
a los registros, el Challenger había realizado este miércoles dos
viajes. Partió rumbo a Punta del Este a las 11:12 y aterrizó en Uruguay a
las 11:44; y una hora después partió desde el país vecino rumbo a San Fernando,
donde tocó tierra a las 13:18.
El Bombardier Challenger 300 es un avión de tamaño Super Midsize Cabin, fabricado
por Bombardier Aerospace, y puede alcanzar
una velocidad de
Su altura
de cabina es de
Además, sus motores garantizan una velocidad de crucero suave y una capacidad de largo alcance de hasta 3.200 millas náuticas, en tanto que sus aletas incorporadas optimizan la eficiencia del combustible y amplían el alcance de la aeronave.