El Gobierno oficializó la ampliación de los préstamos hipotecarios para que puedan financiarse compras de propiedades desde el "pozo". La medida dispuso la creación de los créditos divisibles para los proyectos inmobiliarios, con el objetivo de "fomentar el crédito, impulsar al sector y a la construcción, y reducir el déficit habitacional en la Argentina".
A través del Decreto 1017/2024, la medida fue impulsada en conjunto por los ministerios de Economía y de Desregulación y Transformación del Estado.
"Cualquier persona podrá acceder a un crédito hipotecario a largo plazo para financiar la compra de un desarrollo inmobiliario en construcción (conocido comúnmente como "pozo") o de un lote en un barrio, incluso antes de la subdivisión de terrenos", precisaron las autoridades. "Este financiamiento permitirá la adquisición en las mismas condiciones que las de una propiedad terminada, facilitando así el acceso a vivienda desde las primeras etapas del proyecto", agregaron.
El portavoz presidencial, Manuel Adorni, señaló que la intención es "liberar el sector, aumentar la oferta de viviendas y reducir la telaraña de burocracias". Según la normativa, "las constructoras van a poder pagar su préstamo de a poco, y a medida que lo hagan, se van a ir liberando departamentos para escriturar", añadió.
Respecto del diferencial con lo que estaba vigente, Adorni explicó que "hasta ahora solo podía hipotecarse un edificio entero o un barrio de varias casas completo". "Si la constructora había pedido un préstamo para desarrollar el proyecto, hasta que no pagara toda la hipoteca no se podía escriturar la propiedad a nombre del comprador, lo que desalentaba las ventas", precisó.