Comenzaba el 2024 y lamentablemente ya teníamos femicidios en nuestro país. Más allá de la preocupante estadística, para la familia Fabaro de Punta Alta, el 19 de enero será una fecha que nunca olvidarán.

Ese día, María Elvira Fabaro, una mujer de 38 nacida en Punta Alta, fue brutalmente golpeada y luego asesinada por su pareja, Lucas Polito, en una casa de la localidad de Florida en Vicente López.

El cuadro que encontraron los peritos fue espeluznante. Elvira estaba boca abajo, en el piso, toda ensangrentada junto a su bebé de apenas unos días de vida. La víctima tenía un fuerte golpe en el rostro y al menos 85 lesiones corto punzantes en distintas partes del cuerpo provocadas con una tijera de 21 centímetros.

¿Qué fue lo qué paso? ¿Por qué una persona haría algo tan terrible con su mujer y delante de su propio hijo?

Para entender más sobre esta historia, hablamos con la abogada defensora de la familia, la doctora Cecilia Borroni.

“Está comprobado que el que primero llega al lugar del hecho, es el padre del asesino. Cuando observan la situación junto a su pareja y a su hijo, se dieron cuenta que no tenían cómo esconder el cuerpo de María Elvira y después de dos horas deciden llamar al 911”, comienza explicando la abogada.

“En un primer momento, el femicida empezó a decir que María Elvira había querido atentar contra la vida de su bebé recién nacido. El bebé fue controlado y visto por médicos de la maternidad Santa Rosa, del partido de Vicente López, y no tenía ninguna lesión, con lo cual esa coartada de Polito esfumó fácilmente. Luego intentó hacerse pasar por una persona fuera de sí, para que la Justicia comprara su segunda coartada”, continuó relatando la doctora.

Polito no sólo intentó esas maniobras ese día, también se autolesionó con la misma tijera que asesinó a Elvira, le colocó el elemento cortante en la mano para simular un suicidio, en fin, siempre estuvo manipulando la escena del crimen.

Una vez detenido, el asesino prestó declaración y a partir de allí empezaron a verse muchísimas inconsistencias. “El comenzó a comportarse de manera extraña una vez que llegó a la celda. Le hicieron un examen toxicológico que dio negativo, con lo cual se deduce que no estaba bajo los efectos de ningún psicofármaco ni realizando ningún tipo de tratamiento psicológico como intentó mostrar. Si hubiera estado consumiendo alguna de esas drogas, que se venden bajo receta, hubiera saltado en el examen toxicológico.”

Una vez que pasaron esas primeras horas, comenzaron las actuaciones judiciales, donde hubo algunos detalles realmente increíbles. “El defensor oficial pidió el sobreseimiento de su defendido, pedido que fue tomado por el fiscal de la causa. Hubo irregularidades en la pericia psiquiátrica, se pidió el sobreseimiento por tratarse de una persona inimputable, pero el Juez no hizo lugar a ese pedido.”

¿Y en qué situación estamos actualmente?

“Lucas Polito está detenido en la Unidad Carcelaria de Melchor Romero, tomando alguna medicación que todavía no figura en el expediente. Tengo entendido que tiene acceso a sus redes sociales, que sigue usando Facebook, contactándose con sus amigos y al tanto de todo. Lo más grave es que mantiene ciertos privilegios y cada vez que nosotros solicitamos pruebas, él se entera de cada uno de esos pedidos”, menciona la abogada defensora.

Más allá de todas las irregularidades que fuimos relatando en la nota, y son solamente algunas, la perseverancia de la abogada y de la familia de María Elvira, hicieron que justamente ayer se diera una noticia positiva en el avance de la causa.

“Para nosotros, a partir de hoy comienza verdaderamente la investigación. Lo que no hizo la fiscal hace 5 meses atrás, lo estamos empezando a hacer ahora, porque fue presionada por su superior jerárquico, que es el fiscal de cámaras adjunto. El 17 de abril le dio indicaciones de que tenía que proveer todas las medidas probatorias que habíamos solicitado los apoderados de los familiares de la víctima”, exclamó contenta la abogada.

Quién no podrá olvidar, pese a su edad, el trauma al cual fue sometido, es el pequeño hijo de Elvira. Primero el bebé fue dado en abrigo a sus abuelos maternos y posteriormente fue convertida ese abrigo en guarda. Hoy el bebé se encuentra en Bahía Blanca bajo el excelente cuidado de sus abuelos. “Él está muy bien, nosotros tenemos conocimiento porque le pedimos siempre información al señor Favaro, que nos envía la libreta sanitaria, donde vemos sus vacunas al día, su peso y otras cuestiones, está muy bien cuidado”, finalizó la doctora.