OpenAI incorporó en ChatGPT la función Pago Instantáneo (Instant Checkout), que habilita a los usuarios a realizar compras dentro de la misma interfaz conversacional. La novedad marca un movimiento estratégico de la compañía hacia el e-commerce integrado a la inteligencia artificial, con implicancias directas para gigantes como Amazon y Google, tradicionales referentes en búsquedas y ventas online.
La herramienta, que debuta en Estados Unidos, busca simplificar el proceso para los consumidores, que podrán consultar al chatbot sobre opciones de productos y, en caso de que pertenezcan a comercios compatibles, acceder a un botón de “Comprar” en la misma respuesta. La confirmación del pago y los datos de envío se realiza en el propio ChatGPT, sin redirección a otros sitios.
Los métodos de pago incluyen tarjetas registradas previamente, nuevos datos cargados por el usuario y sistemas exprés de validación. Para el comprador, la operación no tiene costo adicional: OpenAI percibe su beneficio a partir de una comisión que abonan los vendedores por cada transacción confirmada.
Uno de los interrogantes que despertó el lanzamiento es cómo se definen las recomendaciones de productos. OpenAI sostiene que no hay patrocinios ni listados pagos, y que los resultados se priorizan según criterios de relevancia, disponibilidad, precio, calidad del vendedor y habilitación de la compra inmediata.
Sin embargo, al existir una comisión para la empresa por cada transacción, especialistas advierten que ChatGPT podría transformarse en un “recomendador con intereses económicos”, lo que generaría presión en los comercios para optimizar su presencia en este nuevo canal de venta.