Este lunes Susana Giménez volvió al
país junto a su hija Mercedes Sarrabayrouse en un vuelo de línea procedente de
Miami. Hace unos días, la hija de la diva tuvo que ser intervenida de urgencia
para practicarle un trasplante de cadera. En esta oportunidad, Susana contó
detalles del accidente que Mecha sufrió en su hogar, en la ciudad de La Florida.
Visiblemente
cansada, la conductora habló con los periodistas apostados en el lugar,
esperando su llegada. Por su parte, Mercedes, que se trasladaba en silla
de ruedas, no quiso emitir palabras, y se cubrió la cara con la mano cuando le
preguntaron por su estado de salud. En tanto, Susana, acompañada por
asistentes que la ayudaron con el equipaje, reveló cuál fue el incidente que
tuvo Mecha y que la llevó al quirófano. La preocupación en su rostro era
evidente. En diálogo con Puro Show
(El Trece), la presentadora describió el estado de salud de su hija y lo
difícil que fue la experiencia en el exterior. “Estoy más o menos, ella está
muy molesta porque está operada. Por suerte durmió todo el viaje, está con
muchos calmantes. Fue un momento horrible, que te pase algo así afuera... La
verdad horrible”, confesó con gesto serio.
“Mercedes tuvo una caída en el
garaje de casa”. Según relató la conductora, su hija no vio un
escalón y terminó en el suelo de manera violenta. “Se cayó. Se cayó muy mal,
no vio el escaloncito del garaje, yo creí que se había matado, impresionante”,
relató. El golpe fue severo y provocó una fractura de cadera con
desplazamiento, según aclaró la conductora. No era la primera vez que
atravesaba un problema de salud en la zona, pero en esta oportunidad el
diagnóstico fue más grave: “La otra vez no fue fractura, ahora sí, y encima
hubo desplazamiento”, aseguró.
Ante la urgencia, la operación se
llevó a cabo en un hospital de Miami. Si bien el
traumatólogo Alejandro Druetto, médico de confianza de la familia, estaba en la
ciudad, no pudo intervenir porque no cuenta con licencia para ejercer en
Estados Unidos. Finalmente, un equipo de especialistas locales llevó
adelante la cirugía y la recuperación post operatoria fue favorable. “Gracias
a Dios salió todo bien. Mañana empieza la rehabilitación”, confirmó Susana
en su llegada al país.
El regreso a Buenos Aires no estuvo
exento de complicaciones. Cuidar a su hija en esas condiciones demandó
un esfuerzo físico y emocional importante. “Estoy agotada, de llevar dos
carteras, la silla de ruedas, el andador”, explicó. A pesar del cansancio,
no dejó de estar atenta a cada detalle para que Mercedes estuviera cómoda en el
traslado.
La hija de la diva continuará su recuperación en Argentina bajo supervisión médica. Con una prótesis colocada en la cadera y un tratamiento de rehabilitación por delante, se enfrenta a un proceso de adaptación y cuidados. Mientras tanto, Susana, que suele planear con anticipación su año laboral y personal, no tiene claridad sobre lo que hará en los próximos meses: “No tengo ni idea qué voy a hacer”, admitió, dejando abierta la incógnita sobre su futuro profesional, y visiblemente agotada por la situación familiar que está atravesando. Aunque ella acostumbra opinar de temas sociales y políticos, en esta oportunidad no quiso referirse a nada que no tuviera que ver con su persona, ya que está enfocada en la recuperación de su única hija.