Por
Nicolás Fernández (@nicofernandezrelator)
Olimpo
empató 1-1 con Sarmiento de La Banda en el Carminatti
y deberá definir la serie, con
desventaja deportiva, el próximo fin de semana en Santiago del Estero. El
“Aurinegro” contó con varias situaciones, principalmente en el segundo
tiempo, para llevarse el partido, pero pecó de ineficaz. Como era de
esperarse, flojo arbitraje del cordobés Fernando Rekers.
Como pasó en el primer juego de la serie con
San Martín de Formosa, el elenco bahiense pegó de entrada: con los
formoseños, Di Buo marcó la apertura del marcador a los 5 del primer tiempo; hoy,
a los 2 minutos, un zurdazo
descomunal de Ramírez le dio el 1-
Después,
el equipo de Gastón Lotitto, que arrancó
con todo, se quedó. Y fue
creciendo Sarmiento, que en ese tramo del partido demostró por qué es el
subcampeón de la categoría. Desbordes por las bandas, juego asociado, mucha
pelota parada a favor. Así, los de La Banda fueron empujando al local hacia el arco
de Caprio y a los 20 cumplieron con lo que venían amagando: Tévez llegó
hasta el fondo y sacó un gran centro, a la cabeza del goleador paraguayo Bernal,
que marcó sin problemas el empate. El bahiense reaccionó en los últimos
minutos de la etapa inicial, con una media chilena de Rodrigo Acosta, que de milagro no terminó en gol, y con un tiro en el poste de Coacci.
Ya
en el complemento, Olimpo se transformó en el claro dominador del trámite, generando más de cinco situaciones de
riesgo claras, que podrían haber desnivelado el marcador a su favor. Las más nítidas
fueron un disparo de Coacci que sacó el guardavalla sobre el palo derecho, un
desborde del ex Defensa y Justicia que terminó con un centro por bajo y la
definición por arriba del travesaño de Segovia y, sobre el final del juego, un
envío preciso del juvenil Marcos Acosta cayó en la testa de Espejo, que increíblemente definió por encima del
horizontal.
Por último, y después de todo lo que se habló
en la semana, es necesario brindarle un espacio especial al árbitro Rekers.
Primero aclarar que se esperaba un robo descarado y no fue así. Olimpo no
ganó porque erró mucho, no por Rekers. Pero sí es cierto que en el mejor
momento del “Aurinegro”, donde fue claramente el que impuso condiciones (todo
el segundo tiempo), el cordobés hizo de las suyas. Cortó un avance clarísimo
del local para sacar una amarilla de una acción anterior y no cobró un evidente
penal contra Espejo. También hubo un pedido de mano en la última jugada del
encuentro, cuando Osinaga ya estaba jugando de “
La
cuestión es que el duelo en el Carminatti
terminó 1-1 y que, a diferencia de la serie anterior, donde al “Aurinegro” le convenían dos resultados, ahora sólo le
sirve ganar. De lo que no quedan dudas es que en el Playoff Olimpo está jugando bien y, lo fundamental, volvió a ser
competitivo. Eso sí; para clasificarse deberá mejorar una cosa: la efectividad, llevar a la red lo mucho que está produciendo en ataque. Caso contrario se volverá con las manos vacías. Porque allá no
perdonan. Ni el rival (un buen equipo), ni los árbitros...