Por Nicolás Fernández (@nicofernandezrelator)
Fernando Gago DT de Boca. Pese a que el pasado domingo 6 de octubre, en aquella conferencia de prensa en México, dijo que nadie del club de La Ribera se había comunicado con él, ya hacía varios días que era el elegido para reemplazar a Diego Martínez. Quizás haya sido una estrategia para evitar las críticas, ya que ese día su ahora ex equipo, Chivas, jugaba el clásico de Guadalajara frente a Atlas. Ahora, viendo cómo terminó la historia, da la sensación que en ese momento ya estaba todo finiquitado (al menos desde el lado de Boca). Evidentemente, Gago, incluso antes del primer llamado de Riquelme, ya tenía decidido cumplir su sueño de dirigir al "Xeneize".
Como jugador, Gago fue extraordinario. Un “
Hay una característica que el Gago futbolista se la trasladó al Gago entrenador: su
forma de jugar, ver y vivir el fútbol, que quizás, pese a ser un hombre de la casa, no coincide con el
estilo histórico de la garra boquense.
Porque Gago no fue el típico “
Y ese gris lo
tiene también como técnico. Porque
habiendo armado un equipazo como el
que armó en Racing perdió un torneo increíble, insólito e inédito (el de
2022), con todas las ventajas posibles para imponerse en aquel partido
definitorio frente a River, con dos penales a favor y con un rival que nunca
estuvo muy convencido de ganarlo (porque “La Academia” peleaba el título
precisamente con Boca).
Y si bien -es obvio que- todos los equipos juegan a
ganar, Gago prioriza el juego por encima del resultado (lo declaró él mismo). El ataque por
sobre la defensa (el retroceso en su segundo año en Racing le dio más de un
dolor de cabeza al hincha académico). Y Boca es todo lo contrario: no sirve
otra cosa que no sea ganar (el famoso Deportivo
Ganar Siempre del “Coco”) y los grandes equipos boquenses han tenido defensas sobresalientes, siendo
protagonistas, pero sin jugar permanentemente al ataque por ataque (los equipos contragolpeadotes
de Lorenzo y Bianchi son la clara muestra).
¿Gago desconoce esto? ¿Gago sabe que si Boca no gana, por su estilo “fundamentalista”, lo van a destrozar en los medios? Es el primero en saberlo. Y ahí hay una fortaleza, porque conoce Boca como nadie. Sabe lo que puede explotar de sus virtudes (ir para adelante, juntar jugadores de buen pie, guardar la pelota cuando sea necesario, atacar con mucha gente) y en dónde cuidarse (que haya un equilibrio defensivo, principalmente). “Pintita” fue un jugadorazo… ¿Pero es un mal DT? Para nada. ¿Conoce el llamado Mundo Boca? Sí, claro, si se crió en ese ambiente. Veremos, entonces, con todos sus pro y sus contra, si lo que no pudo como jugador lo consigue como entrenador: consagrarse como ídolo de La Mitad Más Uno.