Las imágenes lo muestran llegando en un Ford Escort prestado
a la casa de Máximo Bocci. ¿Qué pasó en esa casa?
El fiscal Jorge Viego tiene todas las piezas en el tablero:
la víctima (Máximo Bocci), el asesino (Jonathan Arroyo) y la testigo (Elsa
Benedetti). Solo le resta conocer el móvil, el cual estaría al caer.
Las cámaras de seguridad mostraron el momento exacto en el
cual el inquilino de calle Emilio Rosas al 200 llega hasta el domicilio de los
propietarios del inmueble, y minutos más tarde se va.
Dentro ocurrió el horror. Arroyo golpeó salvajemente a Bucci
y también hirió a Benedetti. Le fracturó la nariz, la laringe y llevó el cuerpo
hasta el baño. Todo eso en un puñado de minutos. Pero, ¿Por qué?
Otra situación que no queda clara para los investigadores es
el motivo por el cual la mujer del fallecido aseguró que lo último que
recordaba era ver a su esposo descompuesto en el baño. Eso los desconcierta.
En las próximas horas con la declaración de Arroyo podría terminar de revelarse el misterio, y si por el contrario se apega a su derecho de guardar silencio, las conjeturas continuarán sobrevolando.