Luego de conocerse
la noticia sobre la muerte de dos personas que se encontraban en una residencia clandestina ubicada en calle Tres Lomas al 2.200, Sofía Lemos, médica especializada en
Gerontología y presidente de ALMA (un espacio de acompañamiento para familiares
y cuidadores de personas con Alzheimer y alteraciones semejantes), se refirió
a esta problemática que abarca todo el país.
En diálogo con la
redacción de BHInfo, la profesional aseguró que “este no es un tema actual,
es un problema que viene de muchos años y tampoco es que está circunscripto a
Bahía. Esto pasa a nivel país. Los geriátricos clandestinos están desde hace
mucho tiempo, resonaron mucho durante la pandemia y después se volvió a
invisibilizar. Y cada vez que surge un hallazgo con personas fallecidas
renace el tema, que después -es muy probable- que con los días vuelva a
desaparecer”.
Y mencionó una cifra
alarmante: “Es un problema que con sólo googlearlo
se puede ver y cuantificar. Se habla de alrededor de 300 geriátricos o
residencias de larga estadía en Bahía Blanca -yo creo que son un poco más- de
los cuales sólo un 3% están habilitados”, mencionó.
“Nosotros, desde el
lado de la familia, que es la que vemos y abordamos desde ALMA y Recordis (otra agrupación de la que Sofía
es parte), tratamos de asesorar en este paso tan difícil que es la
institucionalización. Institucionalizar a un ser querido es uno de los
pasos más difíciles y que más golpean emocionalmente a las familias. Por eso
no solo tratamos de acompañar y contener sino también buscar un lugar que les
quede cerca, que puedan ir a cualquier hora a visitar a su familiar y las veces
que quieran -sin restricciones-; ver qué calidad de comida reciben y las
condiciones de higiene. Que la cama esté hecha y que el baño esté limpio son
cosas básicas y a su vez nos hablan de calidad de vida y
dignidad”, subrayó.
En ese sentido,
Lemos apuntó al control del Estado: “Las personas que están en un hogar
tienen que tener una actividad recreativa, de entretenimiento, que no estén solamente
sentados mirando un televisor. Es importante saber qué cantidad de personal
hay en el hogar, que haya un médico de referencia, que haya un servicio de
emergencias. Y el Estado tiene un deber muy grande porque hay una Convención
Interamericana que protege los derechos de las personas mayores. Acá no hay
ningún color político. El Estado
debe proteger, sancionar y prevenir todo lo que sean prácticas de aislamiento, abandono,
maltrato, sujeción física y hacinamiento contra las personas mayores. Y deben
dar respuestas si esto ocurre”, afirmó la profesional.
Por las necesidades
económicas que viven las familias argentinas, la mirada a futuro de Sofía no es
optimista: “Lamentablemente este problema lo vamos a seguir teniendo y quizás
en mayor medida, porque acceder a un hogar que cumpla con todas las
habilitaciones es muy costoso y muchas de las familias no pueden afrontar ese
gasto, por eso optan por este Plan ‘B’.
Hoy sostener tres cuidadores en el domicilio, que es el lugar ideal, en un
paciente que tiene un grado de dependencia absoluto es muy difícil y costoso de
sostener”.
Por último, Sofía
Lemos indicó que “desde Recordis
hemos intentado comunicarnos con Región Sanitaria ofreciéndonos para capacitar,
formar, profesionalizar el cuidado y así generar una respuesta a esta problemática.
Hay que hacer visible que cumplir años o adquirir enfermedades no nos quitan
derechos. Nos merecemos un trato digno, humano y un cuidado acorde a las
necesidades de cada persona”.
QUÉ OCURRIÓ
Esta mañana, y tras
un llamado al 911, personal policial se acercó hasta calle Tres Lomas al 2.200,
donde constató que en una residencia clandestina dos personas se encontraban muertas. Según pudo saber la
redacción de BHInfo, los fallecidos
son Mario Navarro, de 63 años, y Diego Sánchez, de 52. En el lugar
trabajaron peritos y policía científica y se esperará a la autopsia de ambos
cuerpos para determinar qué fue lo que pasó.
Cabe mencionar que este lugar no era
desconocido, ya que el pasado sábado BHInfo alertó sobre esta situación anómala, que estaba siendo investigada por la Justicia. Dicho
seguimiento se comenzó a hacer debido a que la dueña de este establecimiento
ilegal es la misma que aún tiene en calle Castelli el psiquiátrico clandestino.