Hoy se cumplen 39 años del que fue el evento más importante en la historia del rock: Live Aid. Un concierto que fue un antes y un después, no solo por la convocatoria sino por la cantidad y calidad de artistas que participaron del mismo.
Live Aid se realizó en dos continentes distintos al mismo tiempo, una sede fue el mítico estadio Wembley de Londres, Inglaterra y la otra fue el estadio John F. Kennedy de Estados Unidos. El motor ideológico del festival fue Bob Geldof, por entonces vocalista de The Boomtown Rats, quien convocó a los más importantes artistas del mundo, mezclados con algunos que recién iniciaban su recorrido musical para enviar recursos a distintos países de África.
El evento recaudó más 100 millones de dólares y el concierto fue retransmitido en directo vía satélite en más de 72 países. Entre los participantes se pueden contar a The Beach Boys, The Four Tops, Paul McCartney, Tina Turner, Elton John, David Bowie, The Who, Queen, Eric Clapton, Bob Dylan, Bananarama, Dire Straits, U2, Elvis Costello y varios más.
Fueron pocos los artistas que se negaron a participar, como Michael Jackson, quien primero había aceptado la invitación pero después la declinó argumentando que: "eran pocos los artistas afroamericanos que estarían tocando" y no quería ser "el negro de la película". Las mismas razones esgrimió Stevie Wonder. Paul McCartney intentó juntar a los Beatles vivos en ese entonces, Paul ya había fallecido, pero no lo pudo lograr y tanto Pink Floyd como AC/DC directamente no aceptaron ser parte del evento del rock más importante de la historia hasta ese entonces.
Como curiosidades o hechos notables de este histórico evento podemos decir que Phil Collins fue el único que estuvo en los dos continentes, gracias a un vuelo especial de los ya desaparecidos aviones Concorde; la eterna rebeldía de The Who quienes se pasaron cinco minutos del minucioso y cronometrado line up; la vuelta de Sir Paul a los escenarios después de cinco años de ausencia; la vuelta de Queen fue tan emblemática que el Royal Mail la graficó en un sello conmemorativo siendo así Freddie Mercury el primer inglés vivo en tener una estampilla de correos británica y la suerte que MTV no escuchó las recomendaciones y ordenes de no dejar registro fílmico de lo sucedido por lo que grabó y el material tardó un tiempo en procesarse para que hoy día haya huellas visuales de una día histórico para la música.
El concierto planeaba reunir 1.000.000 de dólares y llegó a los más de 150.000.000 por lo que superó exponencialmente las expectativas y según las estimaciones del especialista en política africana Alex de Waal, las iniciativas solidarias habrían evitado entre un 25% y un 50% de las muertes en Etiopía y alrededores. Otra parte de lo recaudado se invirtió en programas a largo plazo y otro tanto a los costos que significó hacer tamaño evento.
20 años después Bob Geldof se unió a Bono para intentar algo similar, no tan grandilocuente, llamado "Live 8" más que nada para ejercer presión sobre los mandatarios en la cumbre del G8 a realizarse en Escocia con el slogan: "No queremos tu dinero, queremos tu voz”.