El Gobierno convocó
este viernes, a través de la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social que
depende del Ministerio de Capital Humano, al triunvirato de la
CGT para una reunión que se realizará el martes a las 13 en la sede de
Alem 650.
"Este encuentro será a 'agenda abierta', en le marco del
anunciado Consejo de Mayo. Apuntará a robustecer las relaciones y el
diálogo tripartito entre el sector gremial, empresario y gubernamental",
señalaron desde el Gobierno.
Además de la reunión con Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos
Acuña, el Gobierno se reunirá después con empresarios. "La
agenda de Diálogo Social incluirá también otro encuentro con representantes del
sector empleador cuya fecha será anunciada próximamente", señalaron desde
Capital Humano.
El encuentro con
los líderes sindicales será el primer paso en la conformación del Consejo de
Mayo
que ratificó Milei durante su discurso del 9 de Julio en Tucumán.
En Casa Rosada ya habían advertido que tendrán prioridad el
tratamiento de las reformas en lo laboral, previsional e impositivo. El desafío
del Gobierno es que no quede como una "mesa" para la foto
tal como sucedió durante la administración de Alberto Fernández con el Consejo
Económico y Social.
El 25 de mayo pasado, durante su discurso en Córdoba y tras el fracaso
de esa primera convocatoria por la demora en la aprobación de la Ley Bases,
Milei precisó que el consejo estará integrado un representante del Gobierno
nacional, uno de las provincias, uno de la Cámara de Diputados, uno del Senado,
uno de las asociaciones sindicales y uno del empresariado.
El Consejo de Mayo "tendrá la responsabilidad de trabajar
en los proyectos de ley que materializarán los principios adoptados en el
acuerdo de mayo", añadió Milei. La convocatoria del Gobierno es un
intento de acercamiento a los referentes sindicales que declinaron su
participación en el acto que Milei encabezó en Tucumán.
"Para ir
para una foto, no tiene ningún sentido", fue la definición consensuada por
el triunviro de la central obrera.
Los tres
dirigentes interpretaron que fueron "ninguneados" en la convocatoria
al encuentro y señalaron que el Gobierno nunca esbozó un entusiasmo real en su
participación junto a gobernadores, empresarios y referentes políticos. Se
trató, además, de una forma de marcarle un límite al acercamiento del Gobierno.
Hasta ahora, fueron algunas conversaciones informales con Guillermo
Francos y también con el secretario de Trabajo, Julio Cordero, que ahora los
invitó formalmente a una reunión en la sede de esa cartera.