Por
pedido de la Justicia, el Gobierno busca
un lugar de detención para Cristina Kirchner hasta que se defina la
domiciliaria. Será para que esté alojada desde el momento en que se ponga a
disposición del tribunal que la condenó hasta
que sea aceptada y confirmada la domiciliaria en la dirección fijada para
cumplir la pena de seis años de prisión.
El
Ejecutivo sostiene que está definiendo qué establecimiento presentará y asegura
que se ajustará a los requerimientos judiciales y cuidados sobre el perfil de
la ex presidenta: “No queremos show ni
fotos. Vamos a respetar el proceso”, expresan en Nación.
Según
pudo saber TN, el Ministerio de Seguridad -que preside Patricia Bullrich- descarta que
la ex mandataria sea trasladada de forma preventiva al Complejo Penitenciario
Federal IV de Mujeres de la cárcel de Ezeiza. Es por eso que evalúan
alcaidías de la Ciudad de Buenos Aires. “La
Justicia pide un ámbito acorde a la persona que tiene que estar detenida y
vamos a cumplirlo”, agregan.
La Casa Rosada prepara además un plan de
contención en caso que la oposición convoque a una movilización masiva en
contra de la definición del máximo tribunal sobre la causa Vialidad. Nación
envió ayer fuerzas federales para liberar los cortes en los accesos a la Ciudad
de Buenos Aires y desplegó agentes de las fuerzas de seguridad sobre los
principales edificios públicos.
El Gobierno busca despegarse de fallo de la
Justicia y mantiene la postura de que “es una decisión del Poder Judicial”.
Nación celebró además las palabras de Cristina Kirchner luego de que la Corte
Suprema rechazara su recurso extraordinario. “Hay que reconocerle que no llamó al caos y que no nos atribuyó
influencia en el fallo”, expresan.
Es por
eso que se apunta a mantener la cautela sobre las declaraciones de los
funcionarios al respecto y se bajó la
orden de que no se comunique ningún pronunciamiento a través de las cuentas
oficiales, como de la Oficina del Presidente de la República Argentina
(OPRA) y del Ministerio de Justicia.
La
Casa Rosada sostiene que la baja de la candidatura de la ex presidenta reformuló el esquema de polarización
electoral que planificó la mesa política de La Libertad Avanza en las últimas
semanas para las elecciones del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires:
“Tenemos que definir de qué forma vamos a plantear la campaña”, manifiestan en
el oficialismo.
La mesa electoral de Balcarce 50 trabaja sobre la idea de que la exjefa de Estado no trasladará sus votos a los candidatos del Partido Justicialista que se presenten en la próxima elección. Apunta, además, a enfocar la discursiva en la “discusión de modelos” y en “llevar el modelo de Milei a la Provincia”. Preparan nuevas instancias de negociación con el PRO y la UCR del territorio bonaerense.