En
paralelo a la implementación de las medidas que buscan fomentar el uso de los
dólares del colchón, parte del equipo económico del Gobierno de Javier
Milei planifica sigilosamente otro tipo de iniciativas para profundizar el
denominado avance de la motosierra o ajuste del gasto público. Por un lado,
la Secretaría de Energía proyecta ampliar
la quita de subsidios a las tarifas de luz y gas para los usuarios que viven en
countries y barrios cerrados de todo el país.
La
disposición, que se está analizando en despachos oficiales, es en realidad una extensión a todo el
ámbito nacional de la eliminación de la asistencia que ya se hizo con más de
15.500 usuarios de barrios cerrados del Área Metropolitana de Buenos Aires,
tal como lo había anunciado el vocero presidencial, Manuel Adorni.
Básicamente,
la Secretaría de Energía oficializó una
resolución que le permite aplicar criterios de exclusión por georreferencia.
Es decir, puede quitarles el beneficio a
ciertos grupos que, según considera, tienen el poder adquisitivo suficiente
para afrontar la tarifa plena por la zona en la que viven. “Se entiende que
lo pueden pagar”, explican.
De
esta manera, esos usuarios pasarán al
denominado N1 o de altos ingresos -que pagan la tarifa plena-, en lugar de ser
N2 -tienen el 65% del subsidio- o N3 -cuentan con el 55% de asistencia-. Además,
la Secretaría de Energía resolvió que los
beneficiarios del Régimen de Zona Fría con más de un medidor sólo accederán a
un descuento del 30% sobre la tarifa plena, en lugar del 50% otorgado a quienes
acrediten situación de vulnerabilidad. La decisión se tomó después de
detectar 137.975 casos de titulares que registran el beneficio en más de un
domicilio.
Por
otra parte, desde el Ministerio de Desregulación, que conduce Federico
Sturzenegger, mantienen la intención de
restructurar organismos públicos, lo que implica que esos entes pueden
disolverse o fusionarse. De acuerdo a información oficial, 111 organismos concentran el 48% de los
trabajadores de la administración pública nacional. La idea de esta llamada
reestructuración es transformar 40 de ellos.
En los últimos días el área de Desregulación ya hizo algunos cambios. Por ejemplo, se fusionaron institutos que dependían de la Secretaría de Cultura. Ahora, se procura avanzar en nuevas eliminaciones o reconversiones. Entre las áreas que están bajo observación figuran Producción, Salud y Economía.