Este miércoles inició el cónclave, el
proceso histórico mediante el cual se elegirá al sucesor del fallecido Papa
Francisco. Los 133 cardenales con derecho a voto se reunieron en la Capilla
Sixtina del Vaticano y se pronunció el
tradicional Extra Omnes (fuera todos)
para proceder al cierre de las puertas.
El cónclave debe comenzar entre 15 y 20 días después de que la silla papal quede legalmente vacante, según lo indica la constitución apostólica escrita por Juan Pablo II en 1996 y actualizada por Benedicto XVI en 2013. Así lo hicieron las autoridades del Vaticano, en una primera jornada donde la chimenea despidió humo negro, informando que, en la primera votación, no hubo decisión sobre el nuevo Papa.
De esta manera, el cónclave seguirá su curso este jueves. De acuerdo al cronograma previsto, la jornada comenzará con una votación a las 5.30 (hora de Argentina) y, si no se alcanza un acuerdo, se llevará a cabo una segunda ronda dos horas más tarde.
Un total de 133 cardenales, menores de 80 años, participan de la asamblea, donde se necesita una mayoría de dos tercios, es decir 89 votos, para que haya nuevo Papa. El cónclave definirá el futuro de la Iglesia católica después del pontificado de 12 años de Francisco, que “revolucionó” la curia y causó una división entre reformistas y conservadores. El 80% de los cardenales fueron nombrados por Jorge Bergoglio, en lo que es el mayor y más internacional cónclave de la historia, con prelados de 70 países.