Muchos crecimos con redes sociales que hoy no existen. Seguramente las llegamos a usar después de ir a estudiar en el colegio o la universidad y fueron el inicio de lo que hoy tenemos. Durante los 2000 y principios de la década de 2010, varias redes sociales dominaron internet, pero la evolución tecnológica y la llegada de nuevos competidores las llevaron a su fin.
MSN Messenger
Lanzado en 1999 por Microsoft, MSN Messenger se convirtió en el servicio de mensajería por excelencia de los 2000. Permitía mantener conversaciones privadas o en grupo, enviar emoticonos personalizados, elegir un estado (conectado, ausente, invisible), compartir archivos e incluso hacer videollamadas.
Su impacto en la forma de comunicarse fue enorme, al punto de que la frase “¿Te agrego a Messenger?”, se convirtió en el inicio de muchas amistades y relaciones.
Uno de sus elementos más recordados eran los zumbidos, una función que sacudía la ventana de chat para llamar la atención del otro usuario. También permitía cambiar el nick y añadir frases personalizadas, lo que llevó a una explosión de citas motivacionales que hicieron famoso a autores.
Google+
Google lanzó Google+ en 2011 con la intención de crear una alternativa a Facebook. La plataforma ofrecía una forma innovadora de organizar contactos mediante “círculos”, donde los usuarios podían compartir contenido con distintos grupos de personas sin que se mezclaran. También integraba funciones como comunidades, videollamadas grupales (Hangouts) y una interfaz limpia y minimalista.
A pesar del respaldo de Google y su integración con otros servicios como YouTube y Gmail, Google+ nunca logró despegar. Aunque llegó a tener 400 millones de usuarios registrados, la mayoría no pasaba tiempo en la plataforma. En 2019, tras múltiples intentos de rediseño y una baja participación, Google decidió cerrar el servicio.
Fotolog
Antes de que nuestros hijos y sobrinos publicaran en Instagram, existió Fotolog, una plataforma lanzada en 2002 que permitía a los usuarios subir una sola foto por día y recibir comentarios de sus amigos. La limitación de imágenes generaba un efecto especial: cada publicación tenía un significado más profundo, lo que convirtió a Fotolog en un espacio personal de expresión.
En su mejor momento, alcanzó más de 20 millones de usuarios, con gran popularidad en países como España, Argentina y Chile. Su diseño sencillo y la posibilidad de crear comunidades temáticas atrajeron a una gran audiencia juvenil.
Sin embargo, con la llegada de Facebook y posteriormente Instagram, Fotolog perdió relevancia. La incapacidad de la plataforma para adaptarse a los cambios tecnológicos y la falta de innovación llevaron a su cierre definitivo en 2016.