Sobre las 4 y a causa de una feroz tormenta que se había
desatado en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, un micro de la empresa
Ñandú del Sur terminó despistándose en la ruta 33.
Según testigos que hablaron con medios de aquella zona, el
vehículo de pasajeros estuvo a punto de tumbarse, lo que habría generado
mayores daños a los pasajeros.
Por fortuna, y a último momento, la unidad consiguió
mantener la verticalidad, aunque terminó a un costado del camino, siendo
necesaria la presencia de los distintos recursos públicos.
En detalle, y según trascendió, el colectivo hacía el
habitual recorrido que une Córdoba con Bahía Blanca y el siniestro se produjo a
solo dos kilómetros al sur de la localidad de Piedritas, en dirección a General
Villegas.
Si bien por precaución se dirigió una ambulancia hasta el lugar, todo el pasaje resultó ileso.