La última estafa piramidal que hizo pie en Bahía Blanca y
que anteriormente ya había causado estragos en ciudades como San Pedro o
Gualeguaychú, sumó un nuevo capítulo negro a su historia.
Tras descubrirse que en la presentación de septiembre
quienes sirvieron de oradores no fueron empresarios sino dos actores polacos,
la novedad reciente trajo miedo en todos los involucrados.
Es que se pudo comprobar, por hackeo o directamente por
entrega voluntaria, todos los datos personales de quienes ingresaron engañados
a RainbowEX ya están disponibles para cualquier comprador alrededor del mundo a
través de internet.
Lo advirtió Mauro Eldritch, especialista en seguridad
informática y CEO de la empresa Birmingham Cyber Arms Ltd en la red social X.
Se trata de un lote que "contendría más de 10 gigabites de imágenes de
identificaciones nacionales de diversos países de Latinoamérica y selfies de
usuarios sosteniéndolas", informó.
Entre los datos puestos a la venta en foros de hackers donde
se intercambian registros obtenidos en un ciberataque a la seguridad de la
página web de Rainbowex, cuya vulnerabilidad fue expuesta en Sin Galera por el
experto informático, aparecen documentos de sampedrinos, ciudad previa a la que
captó esta organización antes de desembarcar en Bahía.