Por Nicolás Fernández (@nicofernandezrelator)
Agosto es un mes
especial para el básquet argentino porque año tras año se recuerda la hazaña
lograda por la Generación Dorada en
los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, en el único torneo olímpico, desde
Barcelona
Esta semana, el
15 de agosto (jueves), se cumplieron 20 años de la famosa “palomita” de Manu
Ginóbili frente a Serbia y Montenegro. Lo mismo pasará el 27, cuando se
recuerde la histórica victoria frente al Dream
Team, y el 28, la fecha de la final con Italia (el entrevistado fue una de las figuras de aquel partido).
Alejandro Montecchia fue uno de los tres bahienses que integró aquel magnífico equipo
(Emanuel y Pepe Sánchez, los otros
dos) y tuvo una participación destacada en la definición del encuentro ante
los serbios, ya que fue el encargado de asistir al crack de San Antonio Spurs, quien marcó el doble que sentenció la
victoria nacional por
Al respecto, y
refiriéndose a la célebre jugada, Montecchia dijo: “Serbia mete el libre,
perdíamos por uno (82-81), quedaban menos de 4 segundos y nadie quería agarrar la pelota porque quemaba. Se la pasé a Manu que entrenó toda la vida para tirar
al aro y tiró, je”, recordó el “Puma”, que aseguró que para estas fechas “el
teléfono se pone intenso” y muchos mensajes de WhatsApp se le pasan por alto.
El base también
revivió el “loco” festejo del entrenador Rubén Magnano, que corrió alrededor de
la cancha hecho un fuego: “Es que
veníamos de la furia de la final del
Mundial 2002 (en Indianápolis, cuando Argentina pierde -con polémica- la
definición ante Yugoslavia). Fue espectacular. No vimos su festejo en el
momento porque estábamos abrazándonos entre nosotros, pero cuando llegamos a
la Villa Olímpica, donde había una sala de Internet (en esos años todavía no
existía el wifi), vimos las imágenes y lloramos de la risa”, detalló.
“Con los serbios
había mucha pica, con la mayoría
jugábamos en contra en la liga española. Yo por ejemplo era compañero de Dejan
Tomasevic, que fue el que metió el último tiro libre antes del doble de Manu. La picaban contra nosotros, nos recordaban la última final, son
medio pedantes. Por eso la explosión, el desahogo”, continuó.
Y sobre los
sentimientos que le provoca revivir aquellos instantes de gloria, el “Puma”
Montecchia mencionó: “Uno está más grande y se emociona cada vez más.
Los Juegos Olímpicos siempre los miro completos y me genera algo especial ver
la ceremonia de premiación. Mi sueño era jugar ese torneo y terminó siendo el
mejor torneo de mi carrera. Más allá de ganar, es una experiencia única”.
OTRAS CONSIDERACIONES DEL “PUMA”
- El presente de la Selección Argentina: “Genera un poco de dolor la actualidad.
Vos podés perder porque los tiempos cambian, hoy Alemania es campeón del mundo
y nadie se lo esperaba hace algunos años. Pero en Argentina no se ve una
mejora pronta y eso molesta. Después se puede clasificar y perder, ese es otro
tema. Jugadores hay, nos falta juego interno, más que antes. Hay
jugadores en Europa y muchos chicos se están yendo rápido porque la Liga
Nacional no les brinda las herramientas para crecer acá. Y de esos que se
van temprano no muchos logran trascender”.
- Sobre la posibilidad de haber jugado en la NBA: “La realidad es que estaba muy cómodo en
Valencia, pero San Antonio Spurs me quería. Hubo presión de mi club para
que me quede y finalmente la decisión fue permanecer. Tiempo después voy a
ver a Manu a San Antonio y me ve
Popovich (el entrenador) y me dice ‘¿qué hiciste que no viniste hace dos años?’.
Me quise morir”.
- El partido que Serbia casi le gana a Estados Unidos en París 2024: “Pensé que los serbios se lo ganaban. Y puede que los estadounidenses ya estén preocupados pensando en 2028 (donde serán locales) porque posiblemente no cuenten con LeBron James, Curry y Durant, que fueron los que los salvaron en este torneo”.