La causa por presuntas coimas vinculadas a la provisión de
medicamentos a la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) sumó en las últimas
horas nuevos capítulos de relevancia.
Con el secreto de sumario prorrogado hasta el 19 de
septiembre, el fiscal federal Franco Picardi dispuso una serie de allanamientos
simultáneos en distintos barrios privados donde residen los hermanos Emmanuel y
Jonathan Kovalivker —propietarios de la droguería Suizo Argentina— y el
exfuncionario Diego Spagnuolo.
En esos procedimientos, además, se solicitó información
sobre ingresos y egresos de los countries desde principios de este año, así
como datos de una caja de seguridad vinculada a un exdirector de la Agencia, en
la que se hallaron 80.000 dólares. La fiscalía entiende que el flujo de dinero
es clave para reconstruir la presunta ruta de sobornos que habría beneficiado a
funcionarios nacionales en acuerdo con la empresa proveedora de medicamentos.
En paralelo, la investigación sufrió un cimbronazo con la
renuncia de los abogados defensores de Spagnuolo, Juan Aráoz De Lamadrid e
Ignacio Rama Schultze, quienes se apartaron de la representación alegando
motivos personales.