Los Pumas jugaron un gran segundo tiempo y terminaron goleando a Uruguay por 52-17 en el Padre Ernesto Martearena de Salta, por el cierre de la ventana de julio.

Desde el comienzo, el equipo de Felipe Contepomi salió a dominar la pelota y con la potencia de su pack movió rápido el tanteador con un try penal que también obligó a la amarilla de Lucas Bianchi. Parecía que el conjunto uruguayo iba a sufrir el partido con uno menos, pero logró cerrar su defensa sin problemas.

 

Los Teros fueron avanzando de a poco, y apenas lograron pisar el campo argentino, facturaron con Felipe Aliaga ante una defensa que había quedado desarmada y ofreció muchos espacios pegados al ruck.

 

A Los Pumas no les fluía el juego. Cada dos o tres fases, un error los hacía retroceder, mientras que del otro lado, la visita tenía mayor volumen de juego y lograba hilvanar varios pases, aunque lejos del ingoal. En la más clara de ese pasaje del partido, Matías Moroni habilitó perfecto a Santiago Pernas con un gran rastrón, pero cuando parecía try, el wing de Alumni perdió la pelota en los metros finales.

 

El primer tiempo fue así, chato y deslucido, con poco juego, y a pesar de que Argentina siempre intentó imponer su jerarquía, no podía pasar del 7-7 hasta que Moroni rompió un tackle y se fue solo al try para llegar al descanso arriba en el marcador.

 

En el complemento, Uruguay sumó rápido con un penal de Santiago Alvarez, pero Los Pumas retomaron el control, y Julián Montoya estiró la distancia apoyando debajo de los palos. Un instante después, Santiago Cordero, quien había ingresado por Pernas, se dio el lujo de marcar en su último partido con la camiseta nacional (18º con la albiceleste).

 

Los de Felipe Contepomi dominaban sin problemas, pero iba a llegar una jugada clave. Un try de Rodrigo Isgró iba a ser anulado por una infracción previa de Pedro Rubiolo, quien primero recibió la amarilla, y luego se confirmó su roja. Para colmo, Ignacio Álvarez aparecía solo por la punta y descontaba para meter nuevamente a Los Teros en partido.

 

Había que aguantar con un jugador menos, y Los Pumas se acomodaron bien a la ausencia del segunda línea. primero Justo Piccardo, y luego Rodrigo Isgró, encontraron los espacios y le dieron tranquilidad al conjunto argentino, que liquidaba la historia a falta de 15 minutos.

 

Uruguay ya no tenía resto físico, y Argentina no perdonó. Agustín Moyano y Nicolás Roger marcaron su primer try con el seleccionado y la chapa ya era indescontable (52-17). De ahí hasta el final, Argentina supo controlar el juego para llevarse un merecido triunfo.