El presidente Javier Milei responsabilizó al
gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, por el juicio en contra del país
por la expropiación del 51% de las acciones de YPF.
La Justicia de los Estados Unidos ordenó hoy a
la Argentina que entregue en 14 días el 51% de las acciones de YPF a los fondos
demandantes del juicio por la expropiación de la petrolera. El pedido sería como forma de pago
por la sentencia en contra en primera instancia de US$16.100 millones más
intereses que se determinó en 2023.
“Nos acabamos de enterar que la jueza Preska
falló contra el Estado argentino en el caso de la expropiación de YPF.
Independientemente de la cuestión de fondo, haber llegado a esta situación del país, es responsabilidad directa del
inútil soviético de Axel Kicillof cuando era Ministro de Economía durante la
segunda presidencia de la condenada de CFK”, escribió Milei en un mensaje
por redes sociales. Y agregó: “Lamentablemente,
no le alcanzó con arruinar la economía argentina, así que ahora se está
encargando de destruir la provincia de Buenos Aires”.
En línea
con la catarata de insultos que le destinó la semana pasada, Milei continuó con
su ataque a Kicillof: “Al margen de la
imbecilidad de Kicillof y todos los que nos gobernaron antes, sepan todos los
argentinos que vamos a apelar este fallo en todas las instancias que
corresponda para defender los intereses nacionales. Pasaron más de 10 años
y los argentinos seguimos sufriendo las consecuencias del peor gobierno de la
historia argentina. PD: ¡YO AVISÉ QUE EL
SOVIÉTICO ES UN PELOTUDO! [SIC]”.
Tras
conocer el fallo de la jueza Loretta Preska, de la Corte del Distrito Sur de
Nueva York, el Gobierno activó un comité
de crisis para determinar los pasos a seguir. Primero fue todo hermetismo y
reserva, hasta el mensaje en redes sociales de Milei. Ahora, trabajan en la defensa oficial la secretaria de Legal y Tácnica,
María Ibarzabal, y el procurador del Tesoro Nacional, Santiago Castro Videla.
La decisión de la jueza estadounidense Loretta Preska, que obliga a la Argentina a entregar el 51% a los beneficiarios del fallo, generó preocupación en el seno de la administración libertaria, desde donde apuntan a cambiar la suerte con la apelación o, al menos, ganar tiempo de negociación.