La convocatoria para que la Cámara de Diputados de la
provincia de Buenos Aires sesione y dé ingreso formal —es decir, estado
parlamentario— al proyecto que restablece la reelección indefinida de
legisladores y concejales quedó en stand by.
Es que la iniciativa que ya superó por la mínima el filtro
del Senado no la tendrá fácil para convertirse en ley: enfrenta resistencias
internas en el oficialismo y un rechazo casi unánime en la oposición.
"La semana que viene puede haber novedades, pero no hay
fecha definida para el tratamiento en el recinto. El debate está empantanado
por la falta de acuerdos y las dificultades del para reunir el quórum
necesario", graficaron fuentes parlamentarias. Inicialmente se especuló
con la posibilidad de que se sesione el 2 de julio, pero esa opción luego quedó
en suspenso.
La propuesta, impulsada por el senador kirchnerista Luis
Vivona, modifica artículos del Decreto Ley 6.769 y de la Ley 14.836 —sancionada
en 2016 durante el gobierno de María Eugenia Vidal— que actualmente limitan a
dos los mandatos consecutivos de diputados, senadores provinciales, concejales
y consejeros escolares.
El proyecto excluye a los intendentes, que seguirán
alcanzados por esa restricción. Así, un total de 82 jefes comunales se verán
impedidos de volver a postularse en 2027.
Aunque logró media sanción gracias al desempate de la
vicegobernadora Verónica Magario, el trámite legislativo ahora se vuelve más
espinoso. La Cámara baja está presidida por Alexis Guerrera, del Frente
Renovador, un espacio que ya adelantó su rechazo y que cuenta con 10 de las 37
bancas de Unión por la Patria (UxP), el bloque oficialista.
A esas negativas se suma la de Lucía Klug, de Patria Grande,
cercana a Juan Grabois. Si todos esos votos se mantienen en contra o se
ausentan, el oficialismo quedaría con solo 26 legisladores propios en
condiciones de acompañar el proyecto.