En un Paycom
Center repleto, Oklahoma Thunder derrotó anoche por 103-91 a los Pacers por
el séptimo partido (no se
llegaba a esta instancia desde 2016) de
la final de la NBA 2025 y se coronó como el nuevo campeón. Obtuvieron su
primer título de NBA, ya que habían
logrado un solo trofeo, en 1979, pero como Seattle Supersonics. Repasá el desarrollo del gran encuentro.
Thunder arrancó con Shai Gilgeous-Alexander, Lu Dort, Jalen Williams, Chet Holmgren e Isaiah Hartenstein, mientras que los Pacers con Tyrese Haliburton, Andrew Nembhard, Aaron Nesmith, Pascal Siakam y Myles Turner. A menos de 10 minutos de iniciado el partido, el talentoso base Haliburton tuvo una lesión en la parte inferior de la pierna derecha y se perdió el resto de la final, mientras se espera un parte médico oficial. El primer cuarto estuvo muy disputado y finalizó 25-22 para el local. Y aún así, sin su jugador más decisivo, la visita se fue arriba al descanso 48-47.
Oklahoma arrancó muy enchufado la segunda mitad y promediando el tercer cuarto llegó a estar 11 puntos arriba, con un claro dominio en todo sentido ante Indiana. A la visita, más que nada en el tercer cuarto, se le complicó sin su figura (antes de salir lesionado llevaba 9 puntos y fue decisivo en los encuentros anteriores) y se fue 81-68 abajo.
En el inicio del cuarto tiempo, los locales no le dieron respiro a la visita y llegaron a sacar 21 unidades de luz. El juego estuvo siempre controlado y no pasó mucho más. El encuentro finalizó 103-91 y el Thunder se convirtió en el segundo equipo más joven en coronarse en la NBA. Shai Gilgeous-Alexander, el MVP de la temporada regular y de las finales, fue otra vez el mejor del partido con 29 puntos y 12 asistencias en total.