La influencer Francisca Pérez Espinosa, tras regresar a las
publicaciones en redes sociales luego de dos meses de ausencia, le dio un giro
drástico a su Instagram.
La bahiense, que está acusada junto con su hermana Martina y
Julián Bisignano de estafar a cientos de vecinos por más de 500 millones de pesos,
había publicado cuatro historias el lunes, en su vuelta al cibermundo,
promocionando marcas de ropa.
Tal cual había expresado en su descargo público, y días
antes, anticipado en su charla con el programa Basados, necesariamente tenía que
retornar al trabajo para recaudar fondos que serían destinados a los
damnificados de las entradas que nunca dio, y según sus palabras, de las cuales
no se quedó con dinero alguno.
Sin embargo esta mañana grande fue la sorpresa de varios estafados, cuando al ir al perfil de Frany en Instagram se encontraron con que ahora el mismo es una “cuenta privada”, y solo aquellos a los cuales ella les permite podrán ver sus posteos.