El
escándalo mediático que desde hace años protagonizan Wanda Nara y Mauro Icardi tuvo un nuevo capítulo con la divulgación
de los resultados de las pericias psicológicas que ambos se realizaron a fines
de 2024, en el marco de una causa judicial que involucra la custodia y el
bienestar de sus hijas. La información
fue dada a conocer por Yanina Latorre en América
TV.
La tensión recrudeció en los últimos días
luego que Icardi incumpliera una condición clave impuesta por la Justicia
durante una visita de revinculación con sus hijas. Mientras Nara se
encontraba en Brasil, el futbolista asistió al encuentro acompañado por su
actual pareja, María Eugenia “la China” Suárez, cuya presencia no estaba
autorizada. Este hecho volvió a agitar
las aguas de una separación marcada por denuncias cruzadas y un alto grado de
exposición pública.
Según
reveló Latorre, las evaluaciones fueron realizadas por el Cuerpo
Interdisciplinario Forense (CIF) y arrojaron información sensible sobre el
estado emocional y psicológico tanto de la empresaria como del deportista. En el caso de Wanda Nara, los encuentros
con los peritos se realizaron el 22 de noviembre y el 9 de diciembre de 2024.
Durante esas entrevistas, la empresaria confirmó su vínculo con el cantante
L-Gante y relató que la crisis con
Icardi se desató en
Además,
Nara denunció haber sido víctima de
situaciones de control, amenazas y celos por parte del futbolista,
incluyendo intentos de retenerla en el exterior mediante la ocultación de su
pasaporte y advertencias sobre la
posible difusión de contenido íntimo si decidía terminar la relación.
El
informe psicológico describió que Wanda se presentó "aseada, bien vestida, tranquila y colaborativa", aunque
se destacó "un alto nivel de angustia" y una "limitación para valorar el impacto que el conflicto judicial y su
mediatización generan en la subjetividad de sus hijas".
Por su
parte, las pericias a Mauro Icardi se realizaron el 29 de noviembre y el 17 de
diciembre del mismo año. Según la
periodista, a la primera entrevista habría asistido acompañado por la China
Suárez. El futbolista se definió como "un padre presente" y reconoció que la infidelidad fue el punto
de quiebre de la relación. También admitió que, desde entonces, la pareja
nunca logró recomponerse.
El
informe sobre Icardi lo describió como
"tranquilo, vigil y aseado", y valoró su capacidad para referirse con
detalle a las características y preferencias de sus hijas. Sin embargo, al
igual que en el caso de Nara, los profesionales detectaron "dificultades para dimensionar el daño que el conflicto y su
exposición pública generan en las menores".
Tanto los informes como los testimonios coinciden en identificar el año 2021 como el punto de ruptura, motivado por la infidelidad de Icardi. No obstante, lo que más inquieta a los equipos forenses no son los hechos relatados por los adultos, sino el impacto psicológico que la disputa está generando en las hijas de la ex pareja, expuestas en un conflicto de larga data que trasciende el ámbito judicial y se instala de forma constante en los medios de comunicación.