Por Rubén García (@ruben.garcia76)

¿Tenemos que pensar en Bahía como un lugar donde hacer un evento al aire libre cada vez es más inviable? Si, es una mirada pesimista y negativa pero a la vez un gran disparador para intentar dilucidar una situación mundial que a nosotros nos afecta más que a otras localidades.

El fin de semana pasado la FISA debió suspenderse un día y al siguiente realizarse con situaciones climatológicas similares (porque no quedaba otra), el 15 de febrero This is Techno debió reprogramar el show de Øostil generando un gran perjuicio para la productora, los carnavales del Puerto suspendidos, las ferias reprogramadas y así una larga lista que no solo afecta a Bahía, hace unos días Hernán Cattaneo debió dejar su sesión cuando solo iban dos horas de comenzada y suspender el siguiente, debido a la copiosa lluvia.

Los meteorólogos ya no podrán pronosticar, y no es culpa de ellos sino del desastre ambiental que viene generando el hombre durante décadas. Lo que si debe haber es un sinceramiento de parte de estos profesionales diciendo "hasta acá podemos predecir" para, de alguna manera, el impacto ante el NO pronóstico sea menor. Ni hablar de estas nuevas alertas amarillas constantes que emite el SMN y que, por lo que está a la vista, son un copy paste ante algún atisbo de tormenta, viento o granizo. Sería algo así como "Ah, bueno, yo te avisé".

Lo grave de estas alertas que terminan quedando en nada es el tema que abordamos al inicio de este artículo: No podés pensar en ninguna manifestación cultural o comercial al aire libre sin correr el riesgo de que sea suspendida generando un daño principalmente económico para las personas que la organizan.

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¿Qué hacemos? Desde la comodidad de mi sillón (que tampoco es tan cómodo) puedo decir que necesitamos más lugares para este tipo de eventos. Si bien existen el galpón de la FISA, con alguna dificultad acústica, clubes como Estudiantes, que ceden su espacio pero hasta determinada hora y el DOW, nuevo venue pero solo para algún tipo de eventos hasta hoy por disposición de quienes lo manejan, se debería pensar desde lo privado o porque no municipal en un lugar estilo microestadio para aproximadamente 5000 personas, con buen estacionamiento y ubicado en un lugar estratégico de la ciudad.

Esto requiere inversión, tiempo, ideas y empuje de toda la ciudad para que pueda realizarse, y a mi entender es el momento de encararlo si pensamos que por la situación del clima, según quienes entienden, vamos a vivir en un loop de alertas.

Bahía y los eventos al aire libre hackeados por el clima